Fue un romance muy escandaloso en su época y muy criticado por la sociedad -no solamente por ser interracial- si no, también por ser ilegal en Texas, lo cual los hizo mudarse a Chihuahua. Cuando Lord Beresford muere, Florida (“Lady Flo”) regresó a vivir a El Paso, hasta su muerte y siempre deseando regresar al rancho.
Después de la muerte de Florida, San Pedro de Ojitos -casco principal de todos los terrenos- (incluyendo Santa Anita) fue vendido a otro aristócrata Inglés llamado Lord Urmston, antes de pasar a manos de sus actuales dueños.